El talento ganador es aquel que no solamente cumple con las habilidades necesarias u óptimas para su posición, sino que además está bien posicionado y en el entorno adecuado.
El talento ganador acaba siendo el de aquel equipo que combina las características que le permiten ser más eficiente en su campo, y que se convierte en la estrategia de éxito para las empresas.
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Cada día es más común que las empresas se quejen de que no encuentran el talento que necesitan, sobre todo en campos tecnológicos y científicos, que son ahora los más buscados.
Es algo que sorprende y preocupa a la vez, porque no creo que ese talento no exista, sino que hay algo que falla a la hora de encontrarse con el entorno y la organización adecuada.
Hay un informe muy interesante de la consultora McKinsey sobre cómo las compañías líderes en tecnología y telecomunicaciones utilizan el talento para seguir en la cima.
Según ese informe, encontrar suficiente talento es solo una parte del problema.
El mayor desafío es saber qué habilidades específicas son más importantes para un rendimiento y un liderazgo exitoso.
La consultora hizo un estudio para identificar esas habilidades, y eligió 12 que bien combinadas aseguraban a las empresas un rendimiento 1,8 veces mayor que aquellas empresas que no empleaban esas habilidades, teniendo en cuenta que se centran en el sector de las telecomunicaciones.
Las habilidades más importantes
De las 12 capacidades principales que identifica McKinsey como necesarias para obtener un mayor rendimiento, dos tercios se relacionan con la parte digital y el análisis, que cubrirían la parte más técnica.
En esta parte encontramos Aplicaciones Digitales, Arquitectura Digital, Infraestructura de la Nube, Ingeniería de Datos, Almacenamiento de Datos, Inteligencia Artificial, IoT e Ingeniería General.
Otra parte son las habilidades enfocadas a la gestión del liderazgo, es decir, los aspectos básicos de la creación y gestión de líderes, y de la atracción, retención y desarrollo del talento.
En esa parte entran aquellas cualidades que hemos destacado para ser un buen líder:
1-Dar confianza a tu equipo
Potenciar el talento de cada trabajador y ubicarlo en su mejor lugar
No tener miedo a que tu gente sea mejor que tú en algún aspecto clave.
De hecho, según los datos analizados por McKinsey, las personas con más potencial de crecimiento en esos sectores y con más tasa de cambio de empleo son las que dominan en arquitectura digital, IoT e Inteligencia Artificial y Analítica Avanzada.
2- La combinación ganadora
En realidad, la clave de todo esto se basa en la gestión combinada de varias de esas 12 cualidades.
De hecho, las empresas tienen estrategias de talento que parecen planes de negocios, mediante los cuales usan distintas habilidades combinadas en cada equipo para reforzar a la organización madre.
McKinsey identifica tres combinaciones potentes:
- Innovador Digital: Sería el caso de líderes en el sector del software y hardware como Microsoft o Alphabet.
Con esta estrategia, priorizan la infraestructura en la nube, las aplicaciones digitales, el análisis avanzado, la ciberseguridad y los sistemas IoT.
Los innovadores digitales ganan en el mercado porque pueden lanzar nuevos servicios y optimizar los actuales más rápido, evitando las amenazas competitivas de las empresas emergentes y en expansión.
- Líder de ejecución y conocimiento: Empresas como Amazon, PayPal o Telstra combinan excelencia funcional, experiencia en el dominio y análisis para mejorar continuamente las operaciones, los productos y los servicios.
Se basa en las cualidades técnicas, pero también da mucha importancia a la gestión de equipos, relaciones gubernamentales y estrategia.
- Atracción y retención de cliente: Otras como Netflix, Salesforce o T-Mobile utilizan una combinación de capacidades que aprovechan el marketing, las ventas y la marca digitales y tradicionales para atraer, retener y poseer completamente la relación con el cliente.
Junto con estas capacidades, también priorizan las comunicaciones, la gestión de cuentas y los multimedia creativos.
En definitiva, la moraleja de todo esto es la importancia de generar un plan estratégico también a la hora de elegir los equipos y saber qué cualidades y habilidades se deben potenciar para llegar al objetivo.
Se evidencia con ello que no se trata solamente de dominar el campo técnico o específico del trabajo, sino que las soft skills, la capacidad de liderazgo y las relaciones sociales son tan importantes como las habilidades técnicas.
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